Biodomos: Inmersión Natural y Conservación de Ecosistemas en un Solo Lugar

Los biodomos son mucho más que simples museos; ofrecen una forma conveniente de sumergirte en los ecosistemas más impresionantes de la naturaleza. Estos santuarios cubiertos presentan diversos ambientes con plantas y animales bajo un mismo techo, lo que significa que no tienes que tomar múltiples vuelos para explorarlos. Ya sea que estés paseando por una selva tropical o maravillándote con una costa rocosa, los biodomos son excelentes para educar e inspirar a visitantes de todas las edades. Por ejemplo, la Biosfera 2 en Arizona, ubicada en una peculiar ciudad donde “las montañas se encuentran con el desierto”, replica ambientes globales mientras resalta la importancia del equilibrio ecológico.

Más al norte, descubrirás que el Biodomo de Montreal es una experiencia verdaderamente inolvidable. Forbes acertadamente lo llamó “una de las mejores atracciones de Canadá”, y es fácil entender por qué. Esta joya para toda la familia presenta cinco ecosistemas de las Américas en un solo edificio impresionante, recreando una exuberante selva tropical, las maravillas marinas del Golfo de San Lorenzo, un bosque de arce de Quebec, la accidentada Costa de Labrador y las frías islas subantárticas. En el Biodomo, verás pingüinos caminando en la misma área que capibaras en una aventura como ninguna otra. Montreal en sí es un destino fantástico — imagina las vibraciones parisinas con menos multitudes y costos más bajos.

Selvas, pingüinos y todo lo demás en el Biodomo de Montreal

El Biodomo de Montreal tiene una historia tan notable como los ecosistemas que alberga. Originalmente construido como un velódromo para los Juegos Olímpicos de Verano de 1976, el edificio fue reutilizado como biodomo en 1992. Su arquitectura brutalista presenta losas de concreto de formas abstractas, proporcionando un sorprendente contraste con los vibrantes ecosistemas en su interior. Una capa de tela blanca especialmente diseñada rodea los recintos, acentuando la luz natural de los enormes tragaluces y creando una experiencia aún más inmersiva.

Una vez dentro, comenzarás tu viaje en la selva tropical del Biodomo — el ecosistema más grande del museo con un clima que cuenta con hasta un 80% de humedad. Aquí, un caimán descansa cerca del agua, las ranas se esconden entre la densa vegetación y un perezoso duerme perezosamente en los árboles. Luego, el Bosque de Arce Laurentino exhibe un paisaje típico de Quebec, completo con juguetonas nutrias de río, un lince y un curioso puercoespín. Mientras tanto, el ecosistema del Golfo de San Lorenzo muestra la vida marina y estuarina, con peces relucientes, delicadas anémonas y aves costeras. En el rocoso ecosistema de la Costa de Labrador, encontrarás una enérgica colonia de frailecillos. Finalmente, el área de las Islas Subantárticas replica los helados bordes de Sudamérica, mantenida fría para la comodidad de sus pingüinos habitantes. Es el lugar perfecto para refrescarse en un día caluroso con la familia.

Una de las exhibiciones más nuevas en el nivel inferior del Biodomo, llamada “Una Naturaleza Muy Unida”, se centra en la inmersión sensorial. Ofrece experiencias interactivas para que los visitantes toquen pieles, experimenten aromas y adivinen diferentes sonidos de animales. Niños y adultos por igual disfrutarán usando la aplicación móvil del Biodomo para explorar características de realidad aumentada o profundizar en la información sobre la vida vegetal y animal del museo. Al planificar tu visita, ten en cuenta que el Biodomo está cerrado los lunes.

Un complejo de museos en un Parque Olímpico

El Biodomo de Montreal forma parte del Espace pour la vie (o “Espacio para la vida”) de la ciudad, el complejo de museos de ciencias naturales más grande de Canadá. Con un solo boleto de pasaporte, tendrás acceso a todo el complejo, que incluye el Jardín Botánico, el Planetario, el Insectario y la Biosfera, además del Biodomo. La Biosfera, una impresionante cúpula geodésica, es un verdadero ícono de Montreal e incluso hizo un cameo en la serie de televisión original “Battlestar Galactica” en 1979. El Planetario ofrece un giro único a la observación de estrellas, combinando un espectáculo científico con una exploración más poética del cosmos en cada programa. Es un éxito tanto para familias como para amantes de la astronomía.

El Biodomo y sus atracciones hermanas se encuentran en el Parque Olímpico, otro lugar imperdible en Montreal. El parque cuenta con la imponente Torre de Montreal de 165 metros, que ofrece vistas panorámicas de la ciudad. Pasea por la Esplanade para disfrutar de una mezcla de camiones de comida, festivales e instalaciones de arte, o toma algunas fotos de la arquitectura única del Estadio Olímpico. Mientras estés en la ciudad, puedes descubrir las tiendas vintage y la comida más peculiares en el vibrante y juvenil barrio de Mile End.