Exploración Submarina en la Antártida: La Aventura Secreta del Océano Austral

La Antártida, una vez un misterio remoto reservado solo para los exploradores más audaces, se ha transformado. En los últimos años, el aumento de la demanda y la aparición de embarcaciones de pasajeros de alto rendimiento han abierto las puertas para que turistas regulares exploren las costas más australes de la Tierra. La mayoría de los aproximadamente 120,000 turistas que visitan la Antártida anualmente viajan en barco, lo que les permite admirar la majestuosidad del Océano Austral. En un crucero de expedición, tendrá a su alcance gigantescos icebergs, espectaculares aves marinas y paisajes etéreos, junto con complementos opcionales como excursiones en tierra y los famosos “chapuzones polares”. Sin embargo, la forma más única de presenciar estas aguas de otro mundo es, sin duda, una de las solicitudes más inesperadas en un crucero: una excursión en submarino.

Sumergirse a más de 120 metros (400 pies) bajo las gélidas olas es una experiencia incomparable. Debajo de la superficie, encontrará un paisaje marino aparentemente inhóspito, pero rebosante de vida. La abrumadora oscuridad del agua agudizará sus sentidos hasta que las luces externas de la embarcación se enciendan, ofreciéndole vistas de 280 grados de un entorno que muy pocos han presenciado.

Acceder a una de estas excursiones no es la tarea más sencilla ni la más económica. Si bien la Antártida es uno de los destinos más caros del mundo, ofrece la aventura de su vida. Típicamente, un crucero organizará (o le ayudará a organizar) vuelos a uno de los principales aeropuertos de Argentina, y luego vuelos chárter a Ushuaia, la ciudad más austral del mundo. Desde allí, abordará un barco y navegará por el notoriamente turbulento Pasaje de Drake hacia el extraño pero hermoso mundo nuevo que es la Antártida. Una vez que el clima lo permita, su aventura submarina podrá comenzar.

Qué esperar de una excursión en submarino en la Antártida

Aunque están ganando popularidad, solo unos pocos operadores ofrecen actualmente excursiones en submarino en la Antártida, incluyendo compañías como Viking y Seabourn. Con capacidad para solo seis pasajeros y un piloto en cada inmersión, vale la pena reservar con anticipación con el operador de su elección para garantizar el mejor asiento. Al momento de escribir, las excursiones pueden costar desde $499 USD, dependiendo de la compañía con la que esté viajando, y suelen durar una hora. Esto incluye 15 minutos para el abordaje y las charlas de seguridad, y 45 minutos de navegación bajo las olas.

Si le preocupa la seguridad, la experiencia de la tripulación le tranquilizará. Un bote Zodiac (una lancha de expedición) lo llevará desde su crucero a aguas más profundas donde el submarino y su piloto experto lo esperarán. A continuación, se realizarán exhaustivas comprobaciones de seguridad, respaldadas por lo que el operador turístico antártico Swoop denomina “mecanismos a prueba de fallos”.

Sin preocupaciones, podrá sentarse, relajarse y descubrir los secretos del Océano Austral a través de su ventana tipo burbuja. De todas las excursiones antárticas que podría elegir, esta es, sin duda, la más relajante, única e inesperada. Combina la emoción de aprender escalada en hielo y rapel con la maravilla del buceo o el snorkel, sin requerir absolutamente ninguna experiencia previa. Es tan simple como abordar y dejar que su piloto le guíe.

Vida marina, investigación y ciencia ciudadana en su viaje

Lo que verá una vez que esté en el azul profundo es un misterio. Estrellas de mar, arañas marinas, esponjas y medusas están al alcance, haciendo de las temperaturas heladas y el entorno oscuro su hogar. Sin embargo, la naturaleza de la exploración oceánica significa que ninguna expedición será idéntica. Uno de los pasajeros de Swoop, Sharon Taylor, describió en su sitio web su experiencia de “pasar por un gigantesco enjambre de krill”. Dijo: “¡Se sentía como si estuviéramos en el centro de una gigantesca bola de discoteca brillante!”.

La imprevisibilidad de la exploración de aguas profundas significa que su viaje no es solo una aventura emocionante, sino también vital para la comprensión de los ecosistemas del Océano Austral. Muchas embarcaciones de pasajeros antárticas llevarán consigo un equipo de científicos que recolectan una vasta cantidad de datos mientras el barco se desplaza de isla en isla. Los viajes en submarino a menudo serán filmados para su análisis, y se ofrecen charlas en cubierta donde los científicos explicarán la importancia de lo que se vio. Uno de los submarinos de Viking incluso avistó una medusa fantasma gigante extremadamente rara en 2022, lo que llevó a la compañía a publicar su primer estudio científico.

Aunque no es económico, la oportunidad de desempeñar un papel significativo en la investigación ecológica pionera hace que una aventura submarina antártica sea aún más emocionante. Y, puede estar tranquilo, estos mini submarinos son eléctricos y funcionan con batería, para que la vida marina no sea perturbada por su presencia. Simplemente puede disfrutar de la tranquilidad y la oscuridad de su hábitat en una de las aventuras más únicas del mundo.