Zicatela: De Paraíso Surfista a Refugio de Lujo en Puerto Escondido

Durante años, Zicatela fue considerado un destino exclusivo para surfistas. Ubicada a las afueras de Puerto Escondido, en la costa pacífica de México, es mundialmente reconocida como una de las mejores playas para practicar surf en el país, gracias a las imponentes olas del salvaje Océano Pacífico y los fantásticos rompimientos de la famosa Pipeline Mexicana. Las aguas son tempestuosas y adentrarse en ellas no es para incautos; si bien La Punta, en el extremo sur, es un poco más relajada, el extremo norte de la playa es realmente solo para surfistas experimentados.

Como resultado, Zicatela ha mantenido su ambiente relajado y de mochileros, un lugar informal para viajeros con presupuesto limitado que no surfean y que buscan descansar en una de las mejores playas de México, y para los jinetes de olas serios que quieren enfrentar la Pipeline. Sin embargo, en los últimos años, el ambiente sereno y libre de estrés de Zicatela ha comenzado a atraer a una multitud más grande e internacional. La oferta de alojamiento ha evolucionado, pasando de simples hostales para surfistas y casas de huéspedes económicas a una selección más selecta de opciones boutique. Uno de los mejores ejemplos es el Hotel Humano, un hotel de diseño con una elegancia natural que se mantiene fiel a las tradiciones surfistas de Zicatela, mezclando la cultura de playa y surf con un estilo impresionante para crear un lugar de estadía exquisito y de lujo.

Hotel Humano se encuentra al sur de Zicatela, cerca de Punta Zicatela, a aproximadamente una cuadra de la playa. Está a 10 minutos en auto del centro de Puerto Escondido y es de fácil acceso desde el aeropuerto de Puerto Escondido, que se encuentra a unos 8 kilómetros y cuenta con rutas desde Houston y Dallas, así como desde varios centros mexicanos. Está a unos 190 kilómetros de la vibrante ciudad de Oaxaca, la capital del estado.

Un santuario de paz, belleza serena y diseño exquisito

Hotel Humano se describe a sí mismo como “un santuario donde el espíritu de la humanidad prospera”, y es un entorno gloriosamente detallado que ofrece mucho más que un simple lugar para descansar. El lobby y la cafetería del hotel son un triunfo de la elegancia simple y el lujo descalzo, equipados con el clásico concreto pulido oaxaqueño, acentos de ladrillo calado y muebles rústicos de estilo desenfadado. El diseño se caracteriza por tonos tierra y un minimalismo sofisticado, mezclando a la perfección los espacios interiores y exteriores y haciendo eco de los paisajes y la escenografía de la costa.

El lobby se integra fluidamente en el patio central, donde las tumbonas rodean una piscina de inmersión y un jacuzzi. Un bar en la azotea sirve cócteles excepcionales y vistas panorámicas impresionantes de la costa, las montañas y el océano, siendo un lugar magnífico para observar el atardecer. Un pequeño spa —que incluye salas de masajes, sauna y dos piscinas de inmersión fría— ofrece una bienvenida maravillosamente relajante después de las actividades del día. Cuando se trata de gastronomía, Hotel Humano lo da todo, trayendo al chef Marion Chateau desde La Relève de Marsella hasta el Pacífico mexicano. El Bistró ofrece un fantástico menú centrado en pescados de origen local, una verdadera delicia culinaria.

Hotel Humano cuenta con solo 39 habitaciones, y la atención al detalle en cada una es excepcional. Todas tienen vistas a la piscina y al patio, y si bien las ocho suites son, sin duda, las opciones más destacadas, las habitaciones estándar son también bastante especiales. El estilo es una especie de minimalismo rústico, con toques modernos ocasionales y algunas pinceladas de lujo decadente. La idea fue conservar la elegancia informal y encantadora de la cultura surfista de la zona, añadiendo sofisticación y comodidad.

Surf de clase mundial y belleza natural asombrosa

A principios de 2025, se anunció que Puerto Escondido sería nombrada la 14ª Reserva Mundial de Surf (según Save the Waves) en reconocimiento a su belleza natural, importancia ambiental y espectaculares olas. Esta es otra razón por la cual ningún viajero que se precie debería visitar Puerto Escondido y no intentar al menos aquello que la convierte en un destino de fama mundial: la ola más poderosa de México. Si bien los rompimientos al norte de la playa de Zicatela son extremadamente desafiantes, existen áreas más manejables al sur, convenientemente ubicadas cerca del Hotel Humano. El hotel tiene una excelente relación con la escuela de surf The Art of Surfing, que ofrece lecciones para principiantes. El yoga en la playa al amanecer es otra experiencia imperdible organizada por Hotel Humano para sus huéspedes.

Aunque es fácil simplemente relajarse y disfrutar del suntuoso entorno del hotel, Puerto Escondido y la costa de Oaxaca están llenos de maravillosas cosas para ver y hacer, particularmente para los amantes de la naturaleza, y vale la pena explorar un poco más allá. Las playas vírgenes y la belleza selvática de las Lagunas de Chacahua al sur son un lugar maravilloso para observar la bioluminiscencia, ese mágico fenómeno natural que ilumina el mar en un vívido y eléctrico espectáculo de luz. Las ballenas son visitantes habituales de las aguas cercanas a la costa, y un tour en bote para acercarse a estos asombrosos mamíferos es algo que no debe perderse. Si tiene suerte, también tendrá la oportunidad de ver delfines, tortugas e incluso mantarrayas saltando. Los tours en canoa por los manglares le permitirán encontrarse cara a cara con cocodrilos en el agua, monos en los árboles y una enorme variedad de aves de colores brillantes, haciendo de su visita una verdadera inmersión en la vida marina y la naturaleza vibrante de la región. Todo esto asegura que Zicatela y Puerto Escondido sigan siendo un destino inolvidable y atemporal.